“LA VIOLENCIA ENTRE LOS ADOLESCENTES DENTRO DEL ÁMBITO ESCOLAR”

En México, al igual que en el resto del mundo, la violencia es un problema social de gran impacto que nos afecta a todos directa o indirectamente, ya que atraviesa las fronteras raciales, de edad, religiosas, educativas y socioeconómicas. Es un fenómeno complejo que no podemos atribuir a una sola causa, pues en él intervienen múltiples factores personales, sociales, culturales, y de género, que preocupan a sectores cada vez más amplios de la población mundial. La violencia se define como el uso deliberado de la fuerza física o el poder; ya sea en grado de amenaza o efectivo, contra uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad, que cause o tenga muchas probabilidades de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o privaciones. Es un acto que, ya sea que se dé una sola vez o se repita sistemáticamente, consigue producir daños irreversibles tanto a la víctima como a quien la ejerce. Implica siempre un abuso del poder mediante el empleo de la fuerza, ya sea física, psicológica, económica o política. El poder repercute en todas las relaciones humanas, siempre está presente de diversas formas y a veces de manera sutil y otras de forma más explícita, es la dominación de unos y la subordinación de otros. La exposición constante a la violencia desde temprana edad afecta las capacidades cognoscitivas, emocionales y sociales de los individuos, haciéndoles susceptibles a presentar síntomas psicosomáticos, estados depresivos y psicóticos. Ser víctimas de maltrato físico y emocional dentro del hogar o ser víctimas de abuso sexual, entre otras graves consecuencias, puede convertir al menor en un infractor